Aznar Jr, Baute y el primo del Rey entre los dueños de las villas de Valdecañas que habrá que demoler
Tras más de 15 años de una guerra judicial entre Ecologistas en Acción-CODA y los constructores del complejo de lujo Marina Isla de Valdecañas, situado en Cáceres, el Tribunal Supremo ha ordenado su demolición. Así, de ejecutarse la sentencia de la Sala III de dicho órgano, varios personajes conocidos perderían las villas por las que pagaron en torno a 500.000 euros. Entre ellos, José María Aznar Jr, hijo del expresidente del Gobierno y Ana Botella; Beltrán Gómez-Acebo, primo del Rey Felipe VI; el cantante Carlos Baute y varios empresarios más.
La conocida como ‘Marbella extremeña’ es una isla artificial de 130 hectáreas levantada en el pantano de Valdecañas. Cuenta con 185 villas de lujo, un hotel de cuatro estrellas operado por Vincci, un campo de golf de 18 hoyos, una playa artificial y un club náutico, entre otros servicios. En concreto, las viviendas de alto standing tienen una superficie de entre 270 y 550 metros cuadrados y disponen de parcelas de hasta 800 m2. Además, las villas tienen acceso al puerto deportivo.
Este desarrollo se empezó a construir en 2007, cuando el entonces presidente de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, dio luz verde al proyecto tras recalificar los terrenos protegidos. Desde entonces los promotores han tenido que enfrentarse a los ecologistas, que denunciaron que la construcción se erguía en una zona protegida, al estar incluida en la Red Natura 2000 y declarado Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA).
Demolición e indemnizaciones
La sentencia del Tribunal Supremo traerá consigo un gasto millonario, puesto que la demolición costará 34 millones de euros y el coste de las indemnizaciones se elevará hasta los 215 millones. El terreno deberá volver a su estado anterior y la isla artificial desaparecerá en su totalidad.
No obstante, los propietarios de las viviendas de la urbanización Marina Isla de Valdecañas recurrirán al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) la sentencia del Supremo, según ha confirmado a varios medios el abogado de dos de las tres asociaciones de propietarios de viviendas, Luis Díaz-Ambrona.
Los propietarios no esperaban esta sentencia, ha asegurado el letrado, tras la «bien fundamentada» sentencia el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEX) que ordenaba la paralización de las nuevas viviendas en construcción, pero avalaba el mantenimiento de todo lo construido.
El proyecto inicial contemplaba el desarrollo de más de 550 viviendas de lujo; así como dos hoteles de 150 habitaciones, de ellos, uno está terminado y en funcionamiento, mientras que el otro se encuentra con parte de la estructura levantada.